Los principales enemigos naturales de estas plagas son ácaros que pertenecen a la familia Phytoseiidae. Los cuales tienen una acción depredadora que puede reducir las poblaciones de ácaros fitófagos (Citado en Intagri. Braulio Lemus).
El ácaro depredador Phytoseiulus persimilis, es considerado un importante agente de control y ha sido utilizado en programas de manejo integrado de plagas como una alternativa al uso de acaricidas en el manejo de ácaros (Kavousi y Talebi, 2033).
Neoseilus californicus es otra especie representativa de los Phytoseiidae que ha demostrado ser efectiva en el control de arañas rojas, otras especies de ácaros, insectos y polen, en varios cultivos de todo el mundo.
Algunas de las características para determinar la eficiencia de un depredador, son la habilidad de dispersión, distribución con respecto a la presa, un alto potencial reproductivo, voracidad, un alto grado de especificidad sobre la presa, características morfológicas y grupos taxonómicos (McMurtry, 1982).
Este ácaro también tiene una amplia variedad de controladores biológicos como son: Scolothrips sp. (Thripidae), Phytoseidae, Stethorus sp. (Coccinellidae), Oligota sp. (Staphylinidae), Mosca Arthrocnodax sp. (Cecidomyidae) y Chrysoperla sp. (Chrysopidae).